NOVIEMBRE 25

Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios; Sobre toda la tierra sea tu gloria.

Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios; Sobre toda la tierra sea tu gloria.

LA PALABRA DE DIOS

SALMOS 57: 7 - 11

7 Pronto está mi corazón, oh Dios, mi corazón está dispuesto; Cantaré, y trovaré salmos.

8 Despierta, alma mía; despierta, salterio y arpa; Me levantaré de mañana.

9 Te alabaré entre los pueblos, oh Señor; Cantaré de ti entre las naciones.

10 Porque grande es hasta los cielos tu misericordia, Y hasta las nubes tu verdad.

11 Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios; Sobre toda la tierra sea tu gloria.

REFLEXIÓN

En cada momento del día en que pensamos en nuestro Padre, muy seguramente le expresamos nuestras necesidades y anhelos.  Eso, a mi juicio habla de nuestra confianza absoluta en Él, no solo porque sabemos que nos escucha y tolera aun nuestros peores pensamientos, sino porque esperamos que nos dé lo que deseamos y satisfaga nuestras necesidades.

La propuesta para el día de hoy es que hagamos consciente cada momento de acercamiento al Señor y solo por este día, no le pidamos nada. Alabémosle, adorémosle simple y llanamente porque Él es nuestro Dios y como tal le rendimos tributo. El salmo que traigo a colación habla de eso. Del reconocimiento a su majestad, a su grandeza, a todos sus atributos. 

Como David digámosle "Pronto está mi corazón, oh Dios, mi corazón está dispuesto; Cantaré, y trovaré salmos.  Te alabaré entre los pueblos, oh Señor; Cantaré de ti entre las naciones, porque grande es hasta los cielos tu misericordia, y hasta las nubes tu verdad.  Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios; sobre toda la tierra sea tu gloria".

Amado Padre celestial, el día de hoy solo queremos adorarte, reconocer tu grandeza que se hace evidente cuando nos miramos como personas complejas, inteligentes y obra de tu creación; y cuando miramos a nuestro alrededor y vemos cúan maravilloso eres, Señor. Gracias por tu infinito amor y por permitirnos dimensionar tu omnipotencia. Que toda la tierra reconozca tu gloria. Oramos en el nombre de Jesús, amén.