JESÚS EN TU VIDA

HECHOS 16:31

Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.

REFLEXIÓN

A lo largo de la historia, Dios ha demostrado su fidelidad no solo hacia individuos, sino también hacia familias completas. En el libro de los Hechos, encontramos una promesa poderosa: “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa”(Hechos 16:31). Esta declaración no solo revela el poder transformador de la fe en Cristo, sino también el alcance de su gracia y misericordia sobre nuestros seres queridos. Es un llamado a la fe que trasciende las barreras personales y se extiende hacia aquellos que amamos.

Imagina aquella noche en la prisión de Filipos, cuando Pablo y Silas cantaban himnos en medio de sus cadenas. Un terremoto sacudió los cimientos y las puertas se abrieron. El carcelero, temblando, preguntó: ”¿Qué debo hacer para ser salvo?”. La respuesta de Pablo fue clara y esperanzadora: “Cree en el Señor Jesucristo…”. Aquella misma noche, no solo el carcelero creyó, sino también toda su casa. La fe de un hombre impactó su entorno y trajo luz a su hogar.

Hoy, esa promesa sigue vigente. Al creer en Jesucristo, no solo somos transformados, sino que nos convertimos en un canal de bendición para nuestra familia. Nuestras oraciones, ejemplo y fe constante pueden abrir caminos para que aquellos que amamos también experimenten el poder salvador de Cristo. Confía en esta promesa y mantén encendida la esperanza en tu corazón, porque Dios es fiel para cumplirla.

Señor Jesús, hoy pongo mi fe en Ti y creo en Tu promesa de salvación para mí y mi casa. Te pido que toques los corazones de mis seres queridos, que Tu luz y Tu amor llenen cada rincón de nuestro hogar. Dame la fuerza para ser un testimonio vivo de Tu gracia y la paciencia para esperar en Tus tiempos perfectos. Gracias por la promesa de salvación y por extender Tu misericordia a los que amo. Amén.